Desde una sede alterna que se tornó caótica y al estilo de una asamblea popular, la “supermayoría” de las y los diputados de Morena, el PT y PVEM aprobaron la reforma al Poder Judicial del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El pleno de la Cámara de Diputados —instalado en un gimnasio de la Unidad Deportiva Magdalena Mixhuca, que fue habilitado como una sede alterna a San Lázaro— avanzó en la aprobación de la reforma judicial que, entre otras cosas, ordena la renovación total de los ministros, magistrados y jueces de todo el país, quienes serán electos por voto popular.