Analistas indican que la debilidad en el consumo se debe a la desaceleración en la creación de empleo formal, un menor aumento de los ingresos de los hogares, altas tasas de interés reales, así como a la depreciación del tipo de cambio.
El consumo privado en México podría enfrentar un nulo crecimiento en la recta final del año a pesar de las fiestas decembrinas, reflejo de la cautela al interior de los hogares y la ralentización podría extenderse en los primeros meses del 2025.
Estimaciones del INEGI revelan que en octubre el consumo habría caído 0.1 por ciento mensual y en noviembre registrado un estancamiento, es decir, 0.0 por ciento mensual, según cifras desestacionalizadas del Indicador Oportuno de Consumo Privado (IOCP).