Los funcionarios de la Casa Blanca dicen que están coordinando estrechamente sobre posibles objetivos iraníes, pero el primer ministro israelí los ha tomado por sorpresa en repetidas ocasiones.
WASHINGTON—Mientras Israel prepara un ataque de represalia contra Irán, la administración Biden se parece cada vez más a un espectador, con una visión limitada de lo que está planeando su aliado más cercano en Medio Oriente y una menor influencia sobre sus decisiones.
Los funcionarios de la Casa Blanca dicen que han estado coordinando estrechamente con sus homólogos israelíes y tienen la esperanza de que el primer ministro Benjamín Netanyahu limite un posible ataque contra Irán en respuesta a una andanada de misiles que Teherán disparó contra Israel el martes.