Han sido dos años de intenso trabajo para la LXII Legislatura del Congreso de la Unión, en el que se han discutido y aprobado importantes reformas que permitirán la modernización del marco normativo del país e instrumentar políticas públicas que permitan asegurar los derechos políticos, económicos, sociales, culturales y ambientales de todos los mexicanos. 

La Reforma Educativa, la Laboral, la Hacendaria, la Financiera, la de Transparencia, la de Competencia Económica, la Político-Electoral, la de Telecomunicaciones y Radiodifusión, y la Energética, a las que se suman la nueva Ley de Amparo y el Código Nacional de Procedimientos Penales, han concentrado gran parte de los esfuerzos legislativos en ambas Cámaras. La aprobación de la legislación secundaria de algunas de estas reformas necesitó, incluso, de cuatro periodos extraordinarios de sesiones, un hecho único en la historia de nuestro país.

Sin embargo, el trabajo realizado no se limita a estos temas. Es importante destacar, por ejemplo, que desde el Senado se remitieron al Poder Ejecutivo iniciativas -y reformas- en temas como terrorismo, violencia en los estadios, cooperativas de ahorro, lucha contra la discriminación y trata de personas. 

También se enriquecieron iniciativas turnadas por la Cámara de Diputados sobre iniciativa ciudadana, consulta popular, seguro popular, escuelas de tiempo completo, bebederos escolares, entre otras. Finalmente, del Senado surgió una reforma constitucional para agregar causales de nulidad en elecciones federales y locales, e iniciativas en torno a justicia militar, incremento de penas en caso de secuestro, y rendición de cuentas del Sistema de Ahorro para el Retiro. También se han ratificado instrumentos internacionales, y se realizaron nombramientos de diversos funcionarios de la administración pública federal.

En un ejercicio responsable de las labores legislativas, de debate plural y respetuoso, todas las voces fueron escuchadas, y se tomaron decisiones que pudieran tener un impacto positivo en las condiciones de vida de las mexicanas y los mexicanos. Pero somos conscientes de los asuntos que aún están pendientes, y en los que deberemos concentrar nuestros esfuerzos en los próximos meses.

Para cumplir con lo dispuesto en las reformas aprobadas, designaremos al presidente del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, y a los nueve integrantes del Consejo Ciudadano. Asimismo, nombraremos al titular de la Fiscalía Especializada en Materia de Delitos Electorales de la Procuraduría General de la República, y avanzaremos en el nombramiento de los magistrados de los órganos jurisdiccionales locales, en materia electoral en 18 Estados de la República.

En estos días, los distintos grupos parlamentarios deliberan en torno a los temas que conformarán su agenda de trabajo para el próximo periodo ordinario de sesiones, que comenzará el 1 de septiembre. 

Con la misma vocación de apertura y diálogo que han caracterizado a esta Legislatura, los órganos de gobierno de ambas Cámaras buscarán incluir una amplia variedad de asuntos para su discusión, manteniendo la claridad en el objetivo final del trabajo legislativo: crear y reformar el marco normativo vigente para que todos los mexicanos puedan gozar efectivamente de los derechos que la Constitución, las leyes y los tratados internacionales ratificados por el Estado mexicano establecen, para mejorar las condiciones de vida de la población.

Senador de la República por el estado de Sinaloa.
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