Pregunta (P): La situación de Michoacán se torna un tanto difícil, ahora  hay una nueva estrategia, ¿funcionará esto?     Senador Javier Lozano Alarcón (JLA): Pues mire, la verdad es que todos  debemos esperar y aportar lo que de nuestra esté para que esta nueva  acción muy decidida del Gobierno federal y de Michoacán tenga éxito. Yo  no puede más que desearle éxito al Presidente de la República, al Secretario de Gobernación, que tengan, junto con las fuerzas federales que  van en apoyo o en auxilio a la autoridad local, pues que pongan y   restablezcan el orden, la paz y la civilidad en Michoacán. Es una situación muy preocupante, es una situación en la que la sociedad  está muy confundida; obviamente está más que inquieta, insatisfecha, y que estamos viendo la proliferación de grupos de autodefensa que pues  muchos ignoramos de dónde surgieron, quién los arma, quién los organiza,  cómo han sido tolerados tanto tiempo y vemos también un gobierno estatal  ausente, ausente en todos sentidos, con contradicciones internas y con  oscuridad en cuanto a los intereses a los que obedecen. Yo creo que la única esperanza que tiene hoy Michoacán es precisamente con la ayuda, la intervención directa, la asunción del mando y del control de  parte del Gobierno de la República; de ahí que nosotros no podemos más  que desearle éxito y hacer todo lo que en nuestras manos esté para que  esta nueva incursión, nueva estrategia del Gobierno federal tenga y cumpla  los objetivos que se ha planteado, porque es lo que merece Michoacán y, yo  diría, todo el país.  De tal manera que nosotros como senadores de la República, como Grupo  Parlamentario de Acción Nacional haremos lo que esté en nuestras manos  para que ésta sea una incursión exitosa del Gobierno federal.   P: Senador, pero los grupos de autodefensa pues se niegan a retirarse;  incluso hoy en la mañana Nueva Italia, el grupo de autodefensa de Nueva Italia recuperó precisamente el mando.   JLA: Sí, sí, sí. Bueno, precisamente esto es un desafío porque lo que no  podemos nosotros, bajo ninguna circunstancia, es justificar, ya no solamente  explicar, sino justificar la existencia de estos grupos de autodefensa y que  estén no solamente creciendo sino actuando, haciéndose justicia por sí mismos, por propia mano y ejerciendo violencia para clamar su derecho, que es precisamente lo que prohíbe la Constitución en su artículo 17.  Entonces, lo que debemos nosotros impulsar, propiciar y exigir es que sea por la vía institucional y por la vía de la legalidad como se restablezca   el orden y no con la tolerancia o auspicio a grupos de autodefensa.    Esta negativa es cual si estuviéramos haciendo una negociación, y esto no  es una negociación, esto es un llamando, yo diría suficientemente firme y  severo, a que se restablezca el orden a partir de la legalidad y la  institucionalidad, y si ellos no lo quieren hacer de una manera espontánea,  se tiene entonces que someter como cualquier ciudadano de la República al  imperio de la ley. Entonces, esto no es un llamado a misa, esto es un   llamado a la legalidad y a la institucionalidad y no puede ser que, sea pretexto de una situación de seguridad precaria o de ingobernabilidad en  Michoacán, estos grupos proliferen, crezcan bajo la sombra de la propia ley  y de las instituciones. Entonces, ya para eso entró el Gobierno federal, ya lo está haciendo  â€•“Háganse a un lado, nosotros vamos a ser los que restablezcamos el  orden”― y esos grupos de autodefensa tienen que deponer las armas,  tienen que someterse al imperio de la ley y para eso hay una orden  institucional.  Yo insisto: tiene todo el apoyo, el Gobierno federal, todo mi apoyo para que  restablezca el orden a partir de la ley y de la institucionalidad.   P: ¿No es tarde, senador?   JLA: Bueno, yo sí creo… No es que sea tarde porque esto es un proceso  continuado. Poco lo que podemos nosotros constatar con esto es cómo desde  el primer día el presidente Calderón envió al Ejército para allá,  cuando tuvo conocimiento, directamente del entonces gobernador Lázaro  Cárdenas Batel, de cuál era la situación tan precaria de seguridad que  había en Michoacán. Yo creo que éste es un tema que desafortunadamente se cuidó por muchos años, tanto por las autoridades federales como por las autoridades locales,  y el presidente Calderón actuó con mucha firmeza y hasta el último día  de su mandato, precisamente con la misma estrategia que hoy está siguiendo,  que es la única válida, que es la fuerza que tiene que se proveniente del  Estado para establecer el orden donde se ha roto el tejido social y el orden social también como tal. Entonces, el presidente Peña nieto pues ha hecho lo que en sus manos también ha estado de coadyuvar con las autoridades locales, pero mucho me  temo que si no hay un compromiso auténtico del gobierno del estado y de los  gobiernos municipales, ésta va a ser una estrategia más que no cumpla con  los fines para los que se ha tratado de plantear. Entonces sí tiene que haber un compromiso mucho mayor del gobierno del estado y de los gobiernos municipales y no pensar: “Ya llegó el Gobierno federal y que ellos se  encarguen de todo el asunto”. Para que haya una estrategia exitosa en  materia de seguridad, tiene que haber la absoluta colaboración y  corresponsabilidad del Gobierno estatal y de los gobiernos municipales. P: En este escenario tan complejo, señor, no solamente son las autodefensas, sino también se necesita una labor de inteligencia a fondo  para capturar a los líderes del narcotráfico, del crimen organizado,  porque ésa es otra parte del conflicto.  JLA: Sí, eso también tiene que ver con la inteligencia, con detectar  quiénes están pues tomando estas decisiones, organizándolos, armándolos  y finalmente pues se les tiene que detener y se les tiene que castigar, pero que se haga con toda la severidad que la ley prevé para estos casos. Nosotros no nos vamos a cansar de darle el instrumental jurídico al  Ejecutivo, a los ejecutivos en el país, para que hagan su trabajo; si hay  que reformar leyes, si hay que reformar la Constitución, si hay que reforzar lo que se tenga que reforzar desde el punto de vista legislativo lo  vamos a hacer. Si no hemos tenido regateo en las reformas económicas, mucho menos en las que tienen que ver con la paz pública y la seguridad de los ciudadanos. Entonces, lo vamos a hacer en la medida de nuestras capacidades y aptitudes,  pero aquí el gran reto, el gran desafío, es que la sepan aplicar hasta sus  últimas consecuencias, y para eso hoy no podemos estar tampoco con un juego  de cálculos políticos y mezquindades, esto es mucho más que partidos  políticos, lo de Michoacán es un asunto verdaderamente delicado, en el  cual lo menos que podemos hacer es cerrar filas con el Presidente de la  República y hacer todo lo que en nuestra parte corresponda para que sea una estrategia exitosa. P: Senador, ¿pero qué tiene que hacer de diferencia?, porque finalmente  estrategias, planes, acciones las ha habido desde hace décadas y pues la  inseguridad sigue ahí en el estado. JLA: Bueno, yo creo que esto es de perseverancia, este es un asunto de  perseverancia e insisto, de una corresponsabilidad del Gobierno estatal, sí pienso que ahí en el Gobierno estatal ha habido un exceso, digamos, de una negligencia, una negligencia de no haber asumido con toda la seriedad del  mundo el problema, donde se ha querido mantener artificialmente a un  Gobernador, cuya salud es muy precaria, muy frágil, desafortunadamente, lo  digo con absoluta honestidad y seriedad, donde su Secretario de Gobierno no  sabemos a qué intereses está obedeciendo ni con qué grupos está vinculado, y que los presidentes municipales tanto que criticaron el  “michoacanazo” de Felipe Calderón, como le llamaban, cuando en realidad  había los elementos suficientes para determinar que había presidentes  municipales vinculados con las redes de la delincuencia organizada. Hoy estamos viendo que eso es un verdadero obstáculo para que se devuelva  la paz a Michoacán con mayor celeridad y en mucho mayor orden, precisamente esto lo dificulta porque ya no sabes hasta dónde está infiltrada la  delincuencia, en las propias instituciones estatales y municipales. De tal manera que el principal reto que va a tener el Gobierno federal, me  temo, más que enfrentar a estos grupos es poder lograr una absoluta  corresponsabilidad de las autoridades municipales y del Gobierno estatal, y  que yo no estoy hablando de que se convoque a nuevas elecciones, no hay  condiciones para nuevas elecciones en Michoacán, nadie está planteando  eso, lo que sí queremos es un gobierno de tiempo completo, de tiempo completo y de compromiso completo y que no le avienten solamente la  responsabilidad al Gobierno de la República, pensando que además esto va a  tener una solución de una semana. Es algo que desafortunadamente ha crecido en los últimos años y se ha dado  a pesar del enorme esfuerzo del Presidente Calderón, y hoy espero que también el Gobierno de la República se dé cuenta cómo pues no era  meramente una ocurrencia del Presidente Calderón irse a meter a Michoacán,  ese territorio ya estaba invadido por estos grupos delincuenciales y han llegado nuevos, y los grupos de autodefensa han surgido en los últimos 10  meses, y es un tema no acabado, y es un proceso en marcha y al que le demos  dar, insisto, todo el apoyo al Presidente de la República para que le vaya bien en esta nueva incursión que está tomando, yo creo que adecuada, que así tiene que ser, con toda la fuerza y todos los elementos del Estado,  para eso está. Es la obligación esencial de todo Estado moderno, y el  presidente Peña hace bien en asumirla, pero no lo va a poder hacer solo si no hay un absoluto compromiso del Gobierno estatal y municipales. P: En este caso, ¿(inaudible) pedir licencia del gobernador Vallejo? JLA: Sí, desde luego, él ya debió de haberse hecho a un lado desde hace un buen tiempo, para permitir que un Gobernador en absoluta plenitud, y lo  digo con todo sentido de responsabilidad y seriedad, yo he estado en el  cargo público, en la administración pública por mucho tiempo y sé lo que  implica en términos de una concentración de tiempo y que tienes que estar  entero para poder enfrentar y, sobre todo, pues un desafío tan grande como  el que están viviendo en el estado de Michoacán. Yo sí creo que tiene que haber un relevo, tiene que haber un gobierno en el  cual todos los partidos políticos, todas las fuerzas políticas, con el que  estemos de acuerdo en apoyo a ese gobierno, y que se haga una absoluta  depuración de los mandos, de las autoridades a nivel municipal, porque de  qué sirve que estés combatiendo a las supuestas redes de la delincuencia,  las más visibles, cuando pueden estar totalmente infiltradas en las  autoridades a nivel estatal y municipal, así no hay esfuerzo federal que  pueda ser suficiente y por eso, más que un llamado al Gobierno federal, es  mi apoyo al Gobierno federal y el llamado al Gobierno estatal y municipales  que hagan su trabajo y que se hagan a un lado si no son competentes y no  pueden con el paquete. Y que los grupos de autodefensa sepan que más allá de sus supuestas buenas  intenciones, aquí nadie puede hacerse justicia por propia mano ni ejercer  violencia para reclamar su derecho. P: Senador, ¿cuál sería el camino para poder tener un Gobernador interino  y consensuado con las fuerzas políticas?, ¿desde el Congreso de la Unión  o desde la Presidencia de la República? JLA: No, yo creo que son todas las fuerzas políticas, en los tres órdenes  de gobierno, las que tenemos que sumarnos para hacer un acuerdo político  que permita, con el orden obviamente constitucional vigente, se pueda hacer  una nueva administración pública a nivel local que permita entonces, que  facilite, el tránsito hacia el restablecimiento del orden que está  impulsando el Gobierno de la República. Yo creo que no es un tema jurídico, es un tema quizás más político, y  necesitamos entonces sumar todas las fuerzas en los tres órdenes de  gobierno y en los distintos poderes de la Unión necesitamos simplemente  pues hacer lo que a nuestra parte corresponde.